Fotografías: Ricardo López /Imperio Tlx – Informativo HP
Con diversos pasajes de la biblia, las representaciones del Viacrucis en Chiautempan y del Circo Romano de Aquiahuac se convirtieron en actos donde se desborda la fe y la devoción, pero también el dolor y drama.
Este Viernes Santo en el municipio sarapero miles de fieles tanto locales como nacionales e incluso extranjeros, siguieron la procesos de las tres caídas, donde los protagonistas fueron las agrupaciones religiosas que desde hace 70 años dan vida a la representación de la vida, pasión y muerte de Jesucristo.
El intenso calor no fue impedimento para que uno de los protagonistas de nombre Ángel Teozolt de 20 años y originario del barrio de Xaxala. cumpliera el recorrido de más de 7 kilómetros cargando una cruz de madera de 100 kilogramos.
A lo largo del recorrido por calles de Chiautempan, el paso de la procesión arrancó dolor y lágrimas de varios fieles católicos presentes, pero también la participación de varios voluntarios que ayudaron a cargar la cruz de madera, pero también los pesados troncos de los actores de ladrones, aún recibiendo los latigazos en la espalda.
Bajo un fuerte operativo de seguridad pública, vialidad y protección civil, así como de servicios de emergencia y de salud apoyados por seis ambulancias junto con módulos de hidratación, se llevó a cabo la representación que el martes fue declarada por el Congreso de Tlaxcala como Patrimonio Inmaterial de la entidad.
El Circo Romano de Aquiahuac, la otra representación del Viernes Santo
Mientras tanto en la comunidad de Santa Cruz Aquiahuac, del municipio de Tetlatlahuca, se llevó la representación número 50 del Circo Romano, que forma parte de los pasajes bíblicos que abarcan la muerte de Jesucristo este viernes santo.
Se trató de la obra El Divino Martin, donde los presentes atestiguaron más de pasajes bíblicos y romanos, como la muerte de Juan El Bautista, la escena del leproso, la cruel muerte de los macabeos (niños), la muerte de un esclavo atado a una carreta y de otro quemado con un metal caliente, pero destacó el famoso Circo Romano y en él el villano Tiberio César, quien fue un importante gobernante junto con Poncio Pilato y Herodes, en el tiempo que Jesús se convirtió en el Mesías.