- Criticaron la falta de coordinación con el vecino estado de Puebla para erradicar agresiones y asesinatos
A un año de la emisión de la Alerta de Violencia de Género en Tlaxcala, los avances siguen siendo limitados pues no ha servido para disminuir y mucho menos para erradicar las agresiones y asesinatos de mujeres en la entidad, coincidieron organizaciones sociales y activistas.
Lo anterior durante el conversatorio regional de Puebla y Tlaxcala sobre la importancia de las alertas de violencia de género contra las mujeres ante el X informe periódico de México a la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer, en el que reconocieron que existe un incremento en la violencia que padece este sector de la población.
En su intervención Marina Cortés Torres, activista y cofundadora de la Red Plural de Mujeres, lamentó que las cifras oficiales de agresión en contra de ellas siguen siendo “maquilladas” por los gobiernos, de ahí que “no sabemos las estadísticas reales”, por lo que persiste omisiones y falta de acciones de parte de las autoridades.
Criticó que no existan políticas públicas ni acciones coordinadas entre los gobiernos de ambas entidades federativas para frenar esta problemática que padecen miles de mujeres.
“Tlaxcala viene siendo el tiradero de mujeres de Puebla y viceversa, pero no hay convenios entre estos estados vecinos lo que genera que no haya coordinación entre gobiernos ni la articulación de acciones que busquen disminuir los índices de violencia contra las mujeres. No hay albergues, no hay sanciones a servidores públicos que frenen el acceso a la justicia, además de que quitan presupuesto etiquetado para prevenir y erradicar la violencia contra las mujeres”, apuntó.
A su vez Rocío García Olmedo, ex diputada local de Puebla e integrante de la Red Plural de Mujeres, sostuvo que, a pesar de la emisión de las alertas de violencia de género, “el Estado sigue siendo incapaz de diseñar y establecer políticas públicas para garantizar lo que establece la ley, que es garantizar a la mujer una vida libre de violencia”.
En éste sentido, dijo,, se requiere voluntad política, “pero no retórica, sino la que tiene que ver con presupuesto, con personal capacitado, y con transformaciones culturales, que son de mediano y largo plazo, pero lamentablemente lo que vemos es simulación de querer cumplir con una obligación”