El Secretario de Gobierno, Sergio González Hernández, nuevamente negó que los softwares “Video Synopsis” y “Carbyne”, adquiridos por la actual administración desde hace un año sean para vigilar o el hackeo de móviles de la sociedad civil.
Al contrario, dijo, dado resultados en las diferentes investigaciones que se vienen realizando en materia de seguridad y también contribuye a tener una respuesta inmediata ante alguna contingencia.
Detalló que esta herramienta ha sido importante en esos temas, por tanto, seguirán utilizándola, incluso adelantó que aumentarán la capacidad de estos sistemas en la entidad, “se pueden ver los resultados, aunque es difícil determinar y difícil decirles aquí se utilizó tal software, aquí se utilizaron tal cámara, la verdad lo hemos comentado, yo entiendo su necesidad que se tiene de que ustedes como medios tener conocimiento, los procesos ameritan también una secrecía hasta que termine la investigación”.
Explicó que este nueva tecnología estará en el Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano (C5), que en próximos días será inaugurado por la gobernadora Lorena Cuellar, y que reforzará a los C2 que se construirán en los municipios y con ello tener una cobertura más amplia.
En este sentido el responsable de la política interna en el Estado, negó que su funcionamiento implique alguna intromisión o hackeo a los móviles de la sociedad civil, y reiteró que esos programas están enfocados a las indagatorias de hechos delictivos.
“No para nada, no hay ningún interés, esto se utiliza bajo un proceso totalmente legal que tiene que cumplir con esas características para que jurídicamente ayude a procesar a los delincuentes. Créanme que ha ayudado mucho este tipo de tecnologías porque los resultados se van dando y conjuntamente con las autoridades federales pero con la participación de la Procuraduría General de Justicia y del C4 los resultados son que se han desmantelado dos bandas en la zona de Calpulalpan y la hace unos días”.
Estos softwares, fueron adquiridos con un costo de 10 millones de pesos y están instalados en el área de atención del 911, en el Centro de Control, Comando, Comunicaciones y Cómputo (C4) de la Comisión Ejecutiva del Sistema Estatal de Seguridad Pública, su llegada causó polémica, luego de difundirse que supuestamente violaban la privacidad de los usuarios que reportaran alguna emergencia.