Organizaciones civiles y titulares de instancias municipales de la mujer criticaron que sean excluidas de las diferentes acciones, estrategias y políticas públicas gubernamentales para atender, erradicar y sancionar la violencia contra las mujeres.
En el desarrollo de una mesa de trabajo organizada por la activista Catalina Flores Hernández de la Asociación Civil “Mujeres del Tercer Milenio” y la diputada local Brenda Cecilia Villantes Rodríguez, se escucharon diferentes voces entorno a este sector de la sociedad, así como propuestas para frenar dicha problemática en la entidad que sigue en aumento.
Al respecto la Presidenta de la Mesa Directiva, Alejandra Ramírez Ortiz asentó que “es momento de actuar, porque esta fatal realidad nos ha alcanzado y va empeorando, porque no vemos que baje la violencia, aun cuando hay alerta de género. No vemos que disminuyan esos actos, y seguimos sintiendo la desigualdad en cuanto al salario, en cuanto al trato, seguimos sintiendo la rudeza en el entorno laboral, seguimos sintiendo el acoso cuando queremos ascender de puesto y la discriminación cuando estamos embarazadas”.
A su vez la presidenta de la Comisión de Igualdad de Género y Contra la Trata de Personas del Congreso local, Lorena Ruiz García, urgió a las instituciones públicas y sociales a difundir los programas de prevención y atención de este delito, porque, dijo “debemos prevenir la violencia, debemos llegar a ellas, porque sabemos que cuando una mujer sufre violencia le es difícil pedir ayuda, yo ya lo viví, que cuando una mujer sufre violencia muchas de las veces podemos tener miles de puertas abiertas, pero el miedo nos paraliza y no sabemos qué hacer, por ello que debemos de transmitir información y seguridad para tener para el valor de pedir ayuda”.
Mientras tanto al tomar la palabra la ex legisladora perredista y ex candidata al gobierno del estado, Eréndira Jiménez Montiel reconoció que la Alerta de Género en Tlaxcala es el primero de muchos pasos institucionales “que deberán emprenderse por las autoridades federales, estatales y municipales para que no se quede solo en lo declarativo, porque de foros estamos cansados. La tarea está inconclusa y no podrá calificarse como positiva hasta que no haya rendido frutos en cuanto a abatir los índices de desapariciones forzadas, de trata de persona, de violencia física, psicológica, política, económica, patrimonial, sexual, la institucional, la estructural, es decir, en todos sus tipos y en todos sus modos en que las mujeres podemos ser agredidas por razón de nuestro género”.
En su intervención, la Directora del Centro de Justicia para las Mujeres, Yeny Charrez Carlos, admitió que este órgano dependiente del Poder Judicial en la entidad debe ser reestructurado, ya que carece de la debida funcionalidad para garantizar el cumplimiento de sus funciones, “tenemos un gran reto de restructuración, porque debemos volver a instaurar lo que realmente es o debe ser un centro de justicia para las mujeres y ahora que ya existe a nivel federal un dictamen en el Senado que establece cuál será el trabajo de los centros de justicia para las mujeres, ya no tendrán que ser diferentes iguales operando 24 horas para salvaguardar la integridad de las mujeres sus niños y niñas”.
Para concluir la activista Catalina Flores Hernández, representante de la asociación “Mujeres del Tercer Milenio” y una de las principales impulsoras de la alerta de género hace dos años, aseguró que la problemática actual de la violencia contra las mujeres es resultado de un sistema que hasta el momento en nada ha contribuido para frenarlo.
Por lo anterior se pronunció por la urgente integración de organizaciones de la sociedad civil a las sesiones de trabajo de la Alerta de Género y también las diferentes acciones, estrategias y políticas públicas para prevenir, erradicar y sancionar la violencia contra las mujeres.