Al descartar que el cierre definitivo sea la solución, el Secretario de Gobierno, Luis Antonio Ramírez Hernández, negó que la problemática por la operación del relleno sanitario de Panotla se pueda convertir en un foco rojo.
Abundó que existe apertura con las partes involucrados entre ellos pepenadores, habitantes inconformes, autoridades locales y del gobierno estatal, a quienes se les ha dado toda la información al respecto.
“Se trata de una política transversal con el municipio, desde una matriz de riesgos y que es de atención inmediata, luego del intento de cierre de carreteras para evitar mayores conflictos, con lo que se han abierto al diálogo incluso con reuniones de trabajo con la Procuraduria del Medio de Protección al Ambiente de Tlaxcala y la misma Secretaria del Medio Ambiente”, reiteró el funcionario estatal.
Aunado a que se instaló mesa de trabajo permanente, se establecieron acciones concretas como los decretos y los resultados han sido públicos, aseguró el encargado de la política interna.