- Inconformidad se trata de asunto político del SNTSA aseguró Francisco Javier Jimenez.
El titular de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios de Tlaxcala (Coeprist), Francisco Jiménez Campos, descartó que los alimentos que consumen pacientes y personal de salud estén caducados o en mal estado y aseguró que las denuncias de la lideresa sindical tienen tintes políticos.
Reconoció que alrededor del 30 por ciento de alimentos que se distribuyen no cumplen con la norma sanitaria por lo que son retirados.
En conferencia de prensa afirmó que las prácticas de higiene en la preparación de alimentos y la vigilancia del agua en hospitales y las unidades médicas públicas del Estado, se realizan de acuerdo a las Normas Oficiales Mexicanas vigentes.
Abundó que hasta el momento no hay casos de brotes de gastroenteritis entre pacientes que han consumido alimentos en las unidades médicas del sector salud.
En relación a las denuncias de Blanca Aguila Lima, lideresa de la sección 27 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSA) por existencia de alimentos en mal estado en los nosocomios, dijo que, en cuanto al proceso de preparación de alimentos, se cumple con la norma 251/SSA/1/299 y la infraestructura para almacenar, preparar y distribuir cumple dentro del parámetros del 80 al 100 por ciento, en cuanto a superficies lisas, techos, paredes y utensilios limpios, así como en la separación de los insumos que tienen que cumplir con el color, olor y textura.
Estimó que en cada revisión se desecha entre el 20 y 30 por ciento de los alimentos que llegan, como carne y verduras, llegan con sospechas de estar en mal estado, razón por la cual son separados.
Por lo que hace al agua, indicó que se ha dado cumplimiento a la norma 127 con la colocación de cartuchos de hipoclorito de calcio en las cisternas de las unidades médicas para garantizar el agua limpia, tanto para uso humano como para limpieza.
“Efectivamente se checan en las unidades médicas los alimentos que se van a preparar y el que se determina que no está en condiciones se separa y se rechaza, de ahí salieron las fotos que exhibieron los trabajadores. Jiménez Campos consideró que la protesta de los trabajadores sindicalizados de SESA por ese tema “tiene tintes políticos” y se trata de una campaña de desprestigio, que afecta directamente a los pacientes que tienen la necesidad de ser atendidos en los hospitales y unidades médicas.
Reconoció que los 20 verificadores sanitarios que tiene la COEPRIST son insuficientes para atender los 60 municipios por lo que se presentará una propuesta para la contratación de más personal.