La exigencia era regularizar el servicio de agua potable y recolección de basura.
La retención del Secretario del Ayuntamiento el mecanismo de presión.
La respuesta del gobierno municipal de Eymard Grande Rodríguez no fue el diálogo, pero sí la violencia con el uso de granadores.
El saldo: cinco personas lesionadas y tres elementos de seguridad pública de Totolac retenidos y después liberados.
Esta vez fueron mujeres de la tercera edad, quienes encabezaron al grupo de inconformes.
Desde las 10 de la mañana habitantes llegaron a uno de los pozos de la cabecera para exigir el servicio de agua potable que había sido suspendido.
Ahí llegó el Secretario del Ayuntamiento, Cristian Vélez Vázquez, quien explico que la bomba de distribución se había quemado en la madrugada.
La respuesta no convenció a los usuarios y exigieron la presencia del alcalde Eymard Grande Rodríguez, pero nuevamente el funcionario municipal salió al paso. “El alcalde se encuentra ocupado en el proceso de entrega-recepción”.
Fue entonces cuando los habitantes molestos optaron por retener al funcionario para lo cual lo amarraron con lazo y cinta amarilla.
Paso siguiente cerca de la una de la tarde, entre gritos lo pasearon desde el acceso al municipio en la Colonia Emiliano Zapata hasta la entrada del fraccionamiento “Santa Elena”; una sonrisa burlona y altanera del funcionario no se hizo esperar, situación que arrancó recordatorios familiares de los habitantes inconformes, quienes amagaron con desnudarlo.
El siguiente fue el bloqueo de la carretera federal Tlaxcala-San Martín a la altura de una tienda de conveniencia y esquina con el plantel 11 del Colegio de Bachilleres de Tlaxcala (COBAT) en ambos sentidos.
Después, también colocaron piedras, palos y llantas sobre la autopista México-Veracruz para cerrarla totalmente como medida de presión para obligar la llegada del alcalde perredista, lo cual no sucedió.
La consigna fue que el alcalde se presentara para que el funcionario fuera liberado.
“Te vamos desnudar, -le reiteraron- linchar y quemar con gasolina a ver si así te sigues burlando” fue el reclamo de varias mujeres al momento en que lo cargaron y quitaron sus zapatos y calcetines.
Otra vez lo “pasearon” descalzo en cuatro ocasiones sobre la carretera “de ida y vuelta” . Al fondo elementos de la policía estatal y de la Guardia Nacional solo observan mientras realizan labores para desviar el transporte.
Al paso de tres horas arribaron un grupo de 15 granaderos con escudos y toletes.
No hubo diálogo ni tampoco la presencia de personal de la Secretaría de Gobierno (SEGOB).
De inmediato los elementos fueron en la búsqueda del Secretario del Ayuntamiento.
Sin mediar palabras empujaron a los inconformes al tiempo que dos mujeres policías arrojaban gas lacrimógeno y provocar que el grupo se dispersara.
En la escena entraron dos hermanos y otros familiares (armados) del funcionario municipal de Apizaco para apoyar el rescate.
Por lo menos cinco personas resultaron con lesiones en sus ojos al recibir la descarga de gas lacrimógeno.
Entre los jaloneos y zafarrancho Vélez Vázquez, sin zapatos, calló a un costado del acotamiento de la carretera, se levantó y apoyado por policías corrió hacia la patrulla de la policía estatal que ya lo esperaba.
Los habitantes arrojaron piedras a las unidades, logrando romper el cristal donde iban familiares del Secretario del Ayuntamiento, ante la impotencia de los pobladores.
Sin embargo, lograron retener a tres policías municipales de Totolac, una de ellas mujer, a quienes llamaron “traicioneros” para después de varios minutos liberarlos.
El caso no quedó ahí, las dos carreteras siguen bloqueadas de manera parcial.
A las 20 horas existe graves problemas de circulación de unidades privadas y de transporte público hacia la capital y la periferia de los municipios Ixtacuixtla, Totolac, Nopalucan, Tepetitla, Nativitas, Texoloc y San Martín Texmelucan este último del vecino estado de Puebla.
El conflicto continúa y todo indica que el siguiente paso es la toma de instalaciones de la Presidencia Municipal.
En el conflicto de Panotla este jueves el uso de la violencia y la fuerza pública se antepusieron antes del diálogo.
Al alcalde Eymard Grande Rodríguez le quedan 18 días de administración.
En esta semana ya lleva dos días de conflicto.
El pasado martes trabajadores sindicalizados le exigieron sus pagos pendientes y este jueves el conflicto es por falta de agua y recolección de basura.