Al reunirse con integrantes de la Colectiva 50+1, Capítulo Tlaxcala, en el marco de la firma del Acuerdo Político de Civilidad para garantizar un Proceso 2021 Libre de Violencia Política contra las Mujeres, la candidata a la Gubernatura por el Partido Movimiento Ciudadano reiteró su compromiso a favor de mujeres y hombres.
Eréndira Jiménez Montiel, enfatizó que la organización nacional encabezada por María Elena Orantes y de la cual forma parte activa, reúne a las mujeres fuertes y valientes, que quieren encabezar realmente un cambio transformador para Tlaxcala, para México y para el mundo: “Soy una integrante más de este colectivo feminista, de este colectivo de lucha en el que estamos sin duda las insurrectas, las ingobernables, las desobedientes, las que luchamos ”.
Dijo que sin importar las zonas geográficas en las que se emprendan luchas a favor de las mujeres, estas repercuten en la vida de las demás. Al reconocer el trabajo de quienes se han quedado en el camino y de quienes han expuesto su seguridad, su vida y la vida de sus familias, indicó que a las activistas actuales les toca generar nuevas realidades.
“Tienen en mi a una aliada, siempre he participado en actividades sororas y he estado ocupada en las causas sociales, por eso mi proyecto político es Causa Tlaxcala, para luchar por el respeto de los derechos humanos de todas y todos”. Resaltó.
Al respecto, Eréndira Jiménez resaltó que se mantendrá congruente a sus ideales en lo público y en lo privado: “Tenemos la fuerza real y queremos hacerlo con convicción, con mucha voluntad. Este listón morado, con el que camino las calles, no solo es para la foto, porque ahora cualquiera puede asumirse feminista, representa una lucha histórica y de acción”.
Además, refrendó su compromiso con otras mujeres, propias y extrañas: “Las mujeres no necesitamos ser amigas o conocernos, sino actuar todas por todas, sobre nuestros derechos por lo que nos pase, para que nos deje de pasar”.
En este sentido, recordó en su lucha por los derechos de las mujeres fue cofundadora del Observatorio Ciudadano contra la Violencia de las Mujeres, que nace como una respuesta a la invisibilización de la mujer tlaxcalteca.